Arroz con leche

Hoy os traigo todo un clásico en repostería: el Arroz con Leche. Mi pareja estaba deseando que hiciera este postre. Y es que...¡cómo algo tan sencillo, puede estar tan rico! Y gusta de todas las maneras: más líquido o más espeso...siempre está delicioso!!! Formas de hacer el arroz con leche...todas las que quieras. Yo os dejo una, pero eso no quiere decir que las demás no sean igual de válidas. 

En otra ocasión ya haré otras versiones del arroz con leche, pero hoy...la de toda la vida.

INGREDIENTES:

(para 4/5 raciones)

- 1 litro de leche entera

- 120 gr. azúcar
- 150 gr. arroz redondo
- 30 gr. mantequilla sin sal
- 2 ramas de canela
- La piel de 1/2 limón
- Canela en polvo (opcional)

ELABORACIÓN:

1.- Ponemos a calentar a fuego medio la leche con las dos ramas de canela y la piel de limón, y cuando esté caliente añadimos el azúcar. 
Cuando peléis el limón, no cortéis la parte blanca porque amarga.

2.- Mientras, lavamos el arroz en un colador bajo el grifo hasta que deje de salir el agua blanca (el exceso de almidón del arroz).

3.- Cuando la leche empiece a hervir, añadimos el arroz bien escurrido y dejamos a fuego medio-bajo unos 50 minutos. Hay que remover bastante a menudo para que no se queme la leche o se pegue el arroz en el fondo.

Como mi hija en esta foto, los niños también pueden
 ayudarnos en la cocina

4.- Si transcurrido el tiempo el arroz ya esté hecho y hay poca leche, apartamos del fuego, retiramos la piel de limón y la canela y añadimos la mantequilla en cuadraditos. 

Aunque ya hayamos apartado del fuego, el arroz seguirá absorbiendo leche, por lo que si se nos ha quedado demasiado escaso de leche o nos gusta más líquido (menos cremoso), añadimos un poco de leche caliente y removemos. Por el contrario, si queda demasiada leche deja 10 minutos más al fuego.

5.- Dejamos reposar unos minutos y servimos en tazones individuales. Espolvoreamos con canela al gusto.

NOTAS:

• Cuando pongáis a calentar la leche, además de la canela y la piel de limón, podéis añadir semillas de vainilla. Para ello se corta la vaina de vainilla por la mitad, se abre, y luego se pasa la parte que no corta del cuchillo por todo el largo para quedarnos con las semillas. La vainilla le da un sabor muy rico. Pero...OJO!!! Si vais a añadir canela en polvo al final, no malgastéis la vainilla porque la canela enmascara su sabor.
• Otra forma distinta de presentarlo, y que está riquísima, es quemando la superficie con azúcar y un soplete. ¿Os acordáis que en esta receta también utilizamos el soplete?